Cumpliendo una promesa (sin cumplirla realmente)

Hace algún tiempo que caminaba por aquella acera gris, cubierta por las hojas del otoño. Ahí mismo, alguna vez, caminaron dos personas de la mano. Personas a las cuales ya no lograba recordar sus rostros, oír sus voces, ni sentir su calor. Con el pasar de los años, aquellas personas estaban en un baúl oscuro, olvidado en algún lugar de la memoria.

Pero ese día de abril, mientras iba viajando como todos los días, me encontré a una de esas personas, o mas bien, ella me encontró a mi.

No se que tan "casual" fue el encuentro, pues yo había notado hace rato que alguien estaba siguiendo, pero no me detuve a ver quien era.

-Como estas, tanto tiempo, que casualidad- Dijo exaltada y fingiendo sorpresa.

-Como te a ido en los estudios- Añadió, antes de que alcanzara a responder lo primero.

-He estado bien, ahora mismo iba a tomar el bus para irme a facultad- Le dije

-Yo también camino hacia la estación, ¿te parece si te acompaño?- dijo eso un poco emocionada y sin que le respondiera -si o no-, se gano a mi lado y comenzó forzosamente a buscar algún tipo de conversa.

Para mi era bastante extraño estar caminando junto a ella, tanto así, que sentía que las dos calles que debo caminar hasta la estación de bus, de pronto se volvían kilómetros de avenidas infernalmente interminables.

En el trayecto, ella hablo mucho sobre los viajes que hizo durante el tiempo en que no me veía, sobre como fue logrando sus metas y sobre las nuevas formas de arte que había aprendido. Yo solo me limitaba a escucharla, pues lo que me hablaba para mi no tenia ni la menor importancia.

Cuando al fin llegábamos a la estación, ella se paro dramáticamente frente a mi y me dijo:

-¿Porque usted rompió una promesa que me hizo?

-¿Que promesa? yo no suelo ser alguien que rompe sus promesas

-Recuerdo claramente cuando usted dijo que jamas me dejaría sola

-Creo no haber roto esa promesa, porque efectivamente, yo jamas te deje sola

-¿Como puedes decir eso? cuando rompimos tu me abandonaste y te veo recién ahora, luego de 4 años.

- Cuando terminamos nuestra relación, inmediatamente te rodeaste de hombres que querían "llenarte" con su cariño, por eso rompí todo contacto de inmediato. Yo te deje, pero aun así cumplí mi promesa, porque claramente, jamas te deje sola.